Continúa la ofensiva rusa en Severodonetsk.
Situada en el Este de Ucrania, esta ciudad es un punto clave para controlar toda la región de Lugansk, en el Donbás.
El parte militar publicado este viernes por el Estado Mayor General de las Fuerzas Armadas de Ucrania en su página de Facebook, los «ocupantes rusos continúan disparando con cañones y cohetes contra las posiciones ucranianas» en esa ciudad.
Según los informes, la estrategia militar rusa se basa en atacar también en Lisichansk, ubicada a 10 kilómetros de Severodonetsk.
De esta manera, cortarían las vías de comunicación con la ciudad del este ucraniano para rodearla.
El ejército ruso ha redoblado sus ataques en las regiones de Donetsk y Lugansk, en el este de Ucrania, para establecer un corredor que les permita desplazarse por esta zona y el sur del país que ya controlan.
Severodonetsk es también el único polo de resistencia que queda en la urbe y se localiza en las instalaciones de la factoría química de Azot, donde se refugian más de 500 civiles.
La situación para ellos es desoladora.
«Esto es emotivo. Tengo un nudo en la garganta. Yo crecí aquí. Hay fotos de c uando tenía cuatro años bajo esos árboles. Crecí aquí. Es una pena. Es difícil hablar…», se lamenta Volodymyr Prykhodko, residente en Severodonetsk, de 47 años.
En Severodontesk también se refugian un número indeterminado de soldados ucranianos.
Resisten a los ataques rusos pero según Moscú, algunos de ellos han comenzado a rendirse.
En Bucha, cerca de Kiev, la capital del país, se retoma la normalidad.
En esta ciudad, convertida en el símbolo del horror de la ocupación rusa, un grupo de psicólogos ayuda a la población local a superar su trágica experiencia.
Como en otras ciudades de Ucrania, los civiles reciben formación militar para aprender a manejar armas.