Ucrania dijo haber obtenido nuevas victorias en el marco una contraofensiva lanzada en el este del país, lo que obligó a Rusia a enviar refuerzos al frente de Járkov en un intento de frenar el avance ucraniano.
El presidente Zelenski no ha podido evitar hacer alarde del progreso de sus tropas.
«A día de hoy, las Fuerzas Armadas de Ucrania han liberado y tomado el control de más de 30 asentamientos en Járkov. En algunos pueblos de la región se están realizando controles de seguridad y protección. Estamos tomando gradualmente el control de nuevos asentamientos. Estamos devolviendo la bandera ucraniana y la protección a nuestros ciudadanos en todas partes», dijo el mandatario en su último mensaje.
Las palabras de Zelenski se producen en medio de informaciones ucranianas y occidentales sobre nuevos éxitos de una contraofensiva sorpresa de las fuerzas ucranianas en el este del país, que comenzó esta semana.
Según el Estado Mayor General de las Fuerzas Armadas de Ucrania, en tres días las tropas ucranianas han logrado avanzar 50 kilómetros en el frente de Járkov.
Ataques de civiles como represalia
En medio de las noticias sobre la contraofensiva en la región Járkov, las autoridades ucranianas denunciaron ataques rusos en la homónima ciudad, la segunda del país.
«Por cada éxito de las Fuerzas Armadas, por cada victoria, los rusos responden bombardeando a los civiles», escribió en Telegram Andriy Yermak, jefe de la Oficina del presidente ucraniano.