La Inteligencia iraní ha acusado a la Agencia Central de Inteligencia (CIA) estadounidense, a los servicios secretos británicos (MI6), así como a los de Israel (Mossad) de incitar las protestas en Irán en el marco de la muerte de la joven Mahsa Amini.
Los documentos de inteligencia disponibles muestran que la CIA, en cooperación con los servicios de inteligencia aliados y representantes reaccionarios, antes del inicio de los disturbios, utilizó métodos (…) para lanzar un motín a nivel nacional en Irán con el objetivo de cometer crímenes contra la gran nación», ha especificado.
Estas operaciones para «sentar las bases» e «intensificar las presiones externas» contra Teherán, las habría llevado a cabo «en estrecha colaboración» con la Inteligencia británica, los servicios secretos israelíes para el exterior, y la Inteligencia saudí, así como de varios países más.
«Existe información fidedigna de que la planificación y ejecución operativa de la mayor parte de los disturbios estuvo a cargo del servicio del Mossad en cooperación con los grupos terroristas más poderosos», ha destacado en un comunicado, recogido por la agencia de noticias IRNA.
Fuente: Europa Press