- Entonces llegaron a las puertas de TONY BENGOA, donde Doña Paula exclamó: “TONY BENGOA, mi esperanza eres tú. Yo sé que tú eres el instrumento de Dios para construirnos nuestra casita”
Dajabón, República Dominicana.- La señora Paula y su esposo Joaquín, han dedicado su vida al señor, sirviendo la palabra de Dios en muchas comunidades. Más de 4 décadas de casados, habían logrado obtener su propio hogar, para ellos era su castillo, su palacio. Pero junto a los años llegaron las enfermedades y Don Joaquín, fue intervenido en quirófano para restaurar su Salud y volver a caminar.
Para la emergente cirugía los recursos no estaban, por lo que la pareja se vio obligada a disponer de todo su patrimonio, su única propiedad, su casa, hipotecándola para costear los procesos médicos.
Ya las fuerzas de Doña Paula y Don Joaquín no eran las mismas para hacer frente a la hipoteca. Ambos ya pertenecen al grupo de los adultos mayores, pasando de las 7ma década.
Afortunadamente recuperaron la salud del esposo, nada utópico. Muchas secuelas ahora forman parte del diario vivir de El. Pero los intereses fueron creciendo y lo poco que la pareja de la tercera edad conseguía solo le alcanzaba para saciar pobremente sus necesidades diarias. Por lo que se encomendaron en manos de Dios y decidieron liberarse de la presión financiera y entregaron todo lo que habían logrado juntos. Entregaron al acreedor la vivienda que poseían, quedando literalmente en las calles.
Después de muchos intentos, vagando y sumidos en la vergüenza, decidieron tocar las puertas de quién habían visto aportando soluciones a todos los necesitados de La Provincia, TONY BENGOA, y encontraron la solución.