La llegada de Gary Sánchez a la organización de San Diego Padres fue recibida con mucho escepticismo. La temporada que vivió con Minnesota Twins no fue su mejor y venía de dos experiencias fallidas: una con San Francisco Giants que no llegó a Grandes Ligas y su paso por Nueva York fue efímero con los Mets. Ni hablar del Clásico Mundial con el equipo dominicano.
Pese a todo ello los Padres tenían una enorme necesidad de contar con un receptor que pudiera aportar a la ofensiva del equipo ya que Austin Nola, Luis Campusano y Brett Sullivan no pudieron estar a la altura de las expectativas del equipo.
Sea usted bienvenido Gary Sánchez. El máscara dominicano conectó durante la jornada del miércoles su cuarto cuadrangular de la temporada, superando ya lo que habían hecho de forma combinada durante la campaña los demás receptores (tres cada uno) y aportando además un doble en la victoria frente a los Mariners.
En apenas el noveno partido vistiendo el uniforme de los Padres, Sánchez ha alcanzado esta cifra para convertirse en el líder del equipo en el apartado de vuelacercas desde el pasado 30 de mayo, su primer juego con el equipo.
Además con sus cuatro cuadrangulares desde esa fecha, ha empatado nada más y nada menos que con J.D. Martínez, Mookie Betts y Shohei Ohtani como los jugadores con más jonrones disparados desde que hiciera su debut con el equipo de la Liga Nacional a final del mes pasado.
Gary Sánchez ha dejado una línea ofensiva de .310/.375/.793 y sumado a sus cuatro cuadrangulares, acumula nueve carreras remolcadas, siete anotadas y dos dobletes.
Cuando muchos opinaban que la carrera de ‘El Kraken’ en las Grandes Ligas había llegado a su fin, Sánchez ha demostrado que todavía puede aportar en el máximo nivel y todo apunta a que la confianza que puso San Diego en él (hizo el equipo en las mayores sin pasar por ligas menores), está siendo y seguirá siendo recompensada.