Un bombardeo ruso efectuado durante la noche alcanzó lo que, según Ucrania, era un almacén de maíz en la región de Jmelnitski, en el oeste del país. Esto llevó a un gran despliegue de bomberos para apagar el incendio que se produjo.
La región de Jmelnitski, a cientos de kilómetros de las líneas del frente en el oeste del país, es objetivo habitual del ejército ruso, debido a que alberga una importante base aérea ucraniana.
Moscú desató una masiva andanada de misiles y aviones no tripulados en el oeste de Ucrania, cumpliendo con su promesa de tomar represalias por un ataque ucraniano contra objetivos navales rusos y zonas simbólicas de Moscú.
Zelenski califica ataque como crimen de guerra
Zelenski declaró que una bomba teledirigida había impactado contra un centro de transfusión sanguínea, lo que calificó como un crimen de guerra.
En la región ucraniana de Járkov, dos personas murieron y otras cuatro resultaron heridas tras un ataque aéreo ruso, según informó el jefe de la Administración Militar Regional Local, Oleh Syniehubov.
Aeropuerto suspende vuelos por ataque a Moscú
Por otra parte, el segundo mayor aeropuerto de Moscú suspendió brevemente sus vuelos el domingo por la mañana tras frustrarse un ataque con drones cerca de la capital rusa.
El dron fue destruido por sistemas de defensa antiaérea en la región de Podolsk, en los suburbios de Moscú, informó el Ministerio de Defensa ruso.
Los vuelos se interrumpieron por última vez en el aeropuerto el 30 de julio, cuando dos drones se estrellaron en el distrito de negocios de la ciudad de Moscú después de ser bloqueados por las defensas aéreas rusas.
Líder de Wagner critica al Ministerio de Defensa ruso
Un vídeo publicado el domingo en un canal de Telegram asociado con el grupo mercenario Wagner, muestra al jefe del grupo mercenario, Yevgeny Prigozhin, hablando sobre las tácticas de guerra ucranianas y criticando al Ministerio de Defensa ruso.
Prigozhin menciona que el 5 de agosto, su grupo estaba en «plena disposición de combate». También afirma que, según sus cálculos, la zona bajo control del ejército ucraniano era de más de 100 kilómetros cuadrados y que el ejército ruso no estaba haciendo lo suficiente para resistir a los ucranianos.
Añadió que sus miembros se estaban preparando para «cumplir las tareas» que se les habían asignado.