La delegación de evaluación de Kenia llegó a Haití y debe reunirse con altos funcionarios para analizar la situación actual de seguridad y ayudar al país caribeño a enfrentar la violencia.
La misión, integrada por unas 20 personas, arribó este domingo a bordo del vuelo AA 819 y deberá permanecer tres días en el país, confirmaron fuentes oficiales.
En julio, Kenia aceptó liderar una fuerza multinacional para combatir a las pandillas, que solo en la última semana provocaron casi un centenar de muertos y heridos en Carrefour Feuilles, barrio en las afueras de Puerto Príncipe.
Nairobi también anunció el despliegue de mil policías a la fuerza multinacional que ya cuenta con el apoyo de Bahamas y Jamaica, además de Estados Unidos, Canadá y la Organización de Naciones Unidas (ONU).
En octubre el Gobierno de Haití solicitó a la ONU tropas especializadas, que ayuden a contener a las bandas en un momento en que los grupos criminales paralizaron la distribución de combustible en medio del rebrote del cólera.
Según datos del organismo mundial, las pandillas controlan actualmente el 80 por ciento de la capital, entre ellas zonas estratégicas como las salidas de Puerto Príncipe hacia los departamentos del norte y del sur, el área de la principal terminal petrolera y los emplazamientos de edificios gubernamentales.
De hecho, la visita de los kenianos ocurre en un momento de auge de la violencia con el grupo armado de Gran Ravine que intenta controlar Carrefour Feuilles, lo cual provocó el desplazamiento de más de cinco mil personas.
Las bandas también atacaron la subestación eléctrica de Savane Pistache y dejaron inoperativa la estructura, lo que a su vez causó que una franja de esta capital se mantenga a oscuras.
La Policía se comprometió a hacer frente a los grupos, sin embargo, en más de una ocasión sus directivos reconocieron no contar con los recursos adecuados.