Las Águilas Cibaeñas anunciaron el despido del venezolano Darwin Marrero, quien se desempeñaba como coach de picheo del conjunto que acciona en el campeonato de béisbol invernal dominicano.
El despido de Marrero fue hecho público por el gerente general del conjunto Ángel Ovalles durante la transmisión del partido entre las Águilas y los Tigres del Licey, en el estadio Cibao.
El despido del instructor de picheo se produce luego de que el conjunto cibaeño sufriera cinco derrotas consecutivas, lo que provocó que descendieran hasta el último lugar en la tabla de posiciones del torneo.
En lo que va de temporada, las Águilas cuentan con registro de 5-10 en sus primeros 15 juegos, en el que su picheo cuenta con un porcentaje de carreras limpias permitidas de 5.71, fruto de las 85 carreras limpias que han permitido sus lanzadores en 135.1 entradas lanzadas, en las que han sido castigados con 11 jonrones.
El descontrol ha sido un factor clave para la pobre actuación del cuerpo de lanzadores, al otorgar 71 boletos, sumados a los 155 imparables que han permitido, máximo total entre los seis equipos que accionan en el campeonato.
Además de la problemática que han enfrentado para mantener a los bateadores a raya, el picheo de los cibaeños ha sido víctima de la defensa del conjunto, que es la peor en la temporada de la Liga de Béisbol Profesional de la República Dominicana (Lidom), con un total de 26 errores.
Esta cantidad de pifias ha provocado que los rivales de las Águilas anoten 26 carreras, totalizando 111 vueltas en contra, siendo el único equipo al que le han anotado más de 100 carreras en el campeonato local.
Marrero llegó al equipo precedido de una gran reputación en las labores de coach de picheo y con una relación cercana con el dirigente José Leger, junto a quien trabajó en la sucursal Triple A de los Cardenales de San Luis.