Un teniente de la Policía de Nueva York (NYPD) demandó a esa institución por haberlo destituido como jefe de la Unidad de Investigación Civil porque, supuestamente, hablaba demasiado español con los empleados bajo su mando.
Junior S. Carela, de origen dominicano y quien dirigía la citada división desde hace cuatro años, explicó al NY Post que no solo apoyaba a los hispanos, sino también a oficiales de otras razas e hizo todo lo posible para asegurarse de que hubiera empleados a su alrededor que hablaran varios idiomas para que pudieran evaluar adecuadamente a los candidatos de otras culturas y darles la oportunidad de empleos civiles en el NYPD.
Dijo que estaba conmocionado por el edicto y la transferencia a la Unidad de Detalles Pagados sin responsabilidad de supervisión que resultaría en menos posibilidades de ascenso o un salario más alto.
John Scola, abogado de Carela, calificó de «racista» la destitución y alegó que su cliente fue transferido abruptamente a un trabajo de bajo perfil en el que no tiene los mismos beneficios ni el sueldo que ganaba en el puesto anterior.