El presidente de la Autoridad Palestina, Mahmud Abbas, ha acusado a Estados Unidos de convertirse en «cómplice de genocidio» en la Franja de Gaza tras condenar sin paliativos el veto norteamericano ante el Consejo de Seguridad de la ONU a un alto el fuego inmediato en Gaza como un acto «inmoral» y una «vergüenza» que perseguirá al país «durante muchos años».
Estados Unidos vetó ayer en solitario una resolución impulsada por el propio secretario general de la ONU, António Guterres, esgrimiendo que un cese de hostilidades redundaría en un beneficio inmediato para el movimiento islamista Hamás, y sería contraproducente hacia los esfuerzos diplomáticos de Washington para garantizar la liberación de los rehenes en manos de las milicias palestinas.
En respuesta, Abbas ha calificado la posición de EEUU de «agresiva e inmoral, y de una flagrante violación de todos los valores y principios humanitarios», según un comunicado recogido por la agencia oficial de noticias palestina Wafa.
«Esta política estadounidense convierte a Estados Unidos en cómplice del crimen de genocidio, limpieza étnica y crímenes de guerra cometidos por las fuerzas de ocupación israelíes contra los palestinos en la Franja de Gaza, Cisjordania y Jerusalén», ha añadido el mandatario.
El veto estadounidense, considera así, es representativo de una postura «que se ha convertido en un peligro para el mundo y una amenaza para la paz y la seguridad internacionales», da además «una nueva luz verde a Israel «para continuar con su agresión» y, en términos históricos, «constituirá una vergüenza que perseguirá a los Estados Unidos de América durante muchos años.
Por otro lado, el mandatario agradeció a todos los estados miembros del Consejo de Seguridad que votaron a favor de la resolución — otros 13 votaron ‘sí’ y Reino Unido se abstuvo — y, con esa decisión «se pusieron del lado de la justicia, la paz y la ética humanas».