La ministra de Exteriores de Alemania, Annalena Baerbock, ha descrito el cambio climático como el «mayor problema de seguridad» a nivel mundial y ha defendido que las respuestas deben ser también internacionales.
«La crisis climática es ahora el mayor problema de seguridad para todos los habitantes de la Tierra», ha dicho durante la jornada de apertura del llamado Diálogo Climático de Petersberg, en Berlín. «La crisis climática no se detiene en ninguna frontera, por eso las respuestas tampoco deben detenerse en ninguna frontera», ha argumentado.
«Todos estamos en el mismo barco, lo que significa que solo podemos cambiar la situación juntos», ha señalado Baerbock, antes de agregar que la invasión rusa a Ucrania supuso un retroceso en la lucha contra el cambio climático, tal y como ha recogido la agencia alemana de noticias DPA.
Así, ha asegurado que Alemania «pondrá en marcha más centrales de carbón en los próximos meses, pero solo temporalmente», ante el impacto del conflicto sobre los precios de la energía.
REPRESENTANTES DE 40 PAISES
En el Diálogo Climático de Petersberg participan representantes de unos 40 países y el objetivo de la reunión es preparar la Conferencia de Naciones Unidas sobre el Cambio Climático de 2022, que se celebrará en noviembre en la ciudad egipcia de Sharm el Sheij.
Alemania instauró el Diálogo Climático de Petersberg en 2010. La cita lleva el nombre de un hotel cerca de Bonn en el que se celebró por primera vez. En la presente edición, que concluye mañana, tienen previsto participar el canciller alemán, Olaf Scholz, y el presidente egipcio, Abdelfatá al Sisi.