Bolivia anunció la ruptura de relaciones diplomáticas con Israel en «repudio» a la ofensiva que lleva a cabo en la Franja de Gaza tras el ataque del grupo islamista Hamás el 7 de octubre. La primera decisión de esta naturaleza en la región latinoamericana fue saludada por el grupo islamista, mientras que Israel aún no se ha pronunciado. En paralelo, los presidentes de Colombia y Chile llamaron a consultas a sus embajadores en Israel.
El gobierno del izquierdista Luis Arce es el primero en Latinoamérica en cortar vínculos con Israel desde que escaló el conflicto que deja miles de muertos desde el 7 de octubre.
Bolivia «ha tomado la determinación de romper relaciones diplomáticas con el Estado de Israel en repudio y condena a la agresiva y desproporcionada ofensiva militar israelí que se realiza en la Franja de Gaza«, señaló el vicecanciller, Freddy Mamani.
Desde los ataques del movimiento islamista palestino en Israel, que dejaron más de 1.400 muertos, la respuesta militar israelí en la Franja de Gaza ha dejado más 8.500 fallecidos, muchos de estos niños, según las autoridades sanitarias del territorio palestino.
Estamos remitiendo esta comunicación oficial al Estado de Israel, en la cual hacemos conocer nuestra decisión (…) de romper relaciones diplomáticas, sostuvo la ministra de la presidencia, María Nela Prada, durante la misma conferencia.
Igualmente, señaló que Bolivia exige el «cese de los ataques» en la Franja de Gaza «que ya han provocado hasta ahora miles de víctimas fatales civiles y el desplazamiento forzado de palestinos», remarcó.
El Gobierno anunció además el envío de ayuda humanitaria a la Franja de Gaza
HAMAS SALUDA DECISION
En su declaración, las autoridades no mencionaron la violenta incursión de Hamás, en la que también fueron tomados como rehenes 240 personas, entre ellos numerosos extranjeros, según las autoridades israelíes.
Ningún boliviano aparece en la lista.
Este mismo martes, el grupo islamista Hamás, en un comunicado, saludó el anuncio de Bolivia expresando su «gran estima» por la decisión que tomó frente al Gobierno del primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, e instó «a los países árabes que han normalizado sus relaciones» con Israel a hacer lo propio.
El Gobierno israelí no se ha pronunciado de momento.
En el pasado, Bolivia ya había roto las relaciones diplomáticas con Israel, que datan de 1969.
En 2009, el gobierno del líder indígena Evo Morales —exaliado de Arce— tomó la misma determinación por un ataque israelí en la Franja de Gaza.
Bolivia retomó las relaciones una década después por orden de la mandataria derechista Jeanine Áñez, quien sustituyó a Morales en el poder en medio de una severa crisis interna.
Durante su declaración de este martes, Prada —que habló en calidad de canciller encargada— dijo que el Gobierno «comparte» la condena del secretario general de la ONU, António Guterres, frente a la situación en Gaza.
«Al mismo tiempo, llamamos al diálogo y soluciones estructurales que respeten la vida, para evitar una mayor escalada en el conflicto», añadió.
CHILE Y COLOMBIA LLAMAN SUS EMBAJADORES A CONSULTA
También este martes, el presidente de Chile, Gabriel Boric, llamó a consultas a su embajador en Israel «ante las inaceptables violaciones del Derecho Internacional Humanitario» que ese país está llevando a cabo en la Franja de Gaza.
«Chile condena enérgicamente y observa con gran preocupación… estas operaciones militares», escribió Boric en una publicación en la plataforma de redes sociales X.
Ante las inaceptables violaciones del Derecho Internacional Humanitario en que ha incurrido Israel en la franja de Gaza, como Gobierno de Chile hemos resuelto llamar en consultas a Santiago al embajador de Chile en Israel, Jorge Carvajal.