El secretario del Departamento de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, ha considerado que la salida de Rusia del Tratado de Prohibición Completa de los Ensayos Nucleares es «un paso significativo en la dirección equivocada».
«Estamos profundamente preocupados por la medida prevista por Rusia (…) representa un paso significativo en la dirección equivocada (…) continuaremos enfatizando la irresponsabilidad de la reciente escalada retórica de Rusia respecto a las pruebas de armamento nuclear», ha señalado Blinken en un comunicado.
En ese sentido, ha instado a las autoridades rusas a cumplir con las recientes declaraciones de algunos de sus funcionarios en las que aseguran que la salida del tratado no implica la reanudación de pruebas nucleares.
«La acción de Rusia sólo servirá para hacer retroceder la confianza en el régimen internacional de control de armamentos (…). Moscú continúa así su preocupante y equivocado esfuerzo por aumentar los riesgos nucleares y elevar las tensiones mientras prosigue su guerra ilegal contra Ucrania», ha concluido el secretario de Estado.
Previamente, la Unión Europea también ha condenado la salida de Rusia de un tratado «crucial» en materia de desarme y no proliferación, entre otras cosas porque abre la puerta a la vigilancia y a la creación de herramientas «creíbles, fiables e independientes» que garantizan que ningún país lleva a cabo un ensayo nuclear.