Los bomberos recuperaron este viernes el cuerpo del último de los cuatro desaparecidos tras la explosión en las profundidades de una central hidroeléctrica de un embalse de Suviana, en Bolonia (centro-norte de Italia) por lo que el balance definitivo es de siete víctimas mortales y cinco heridos.
La explosión se produjo el pasado martes por la tarde y durante tres días, alrededor de 200 personas, entre ellos los buzos del cuerpo de bomberos, han buscado en el piso menos 9 de la planta, debajo del nivel del lago, donde se habían encontrado las primeras tres víctimas y que quedó inundado tras la explosión.
La última víctima localizada es Vincenzo Garzillo, de 68 años, mientras que los cuerpos encontrados el martes son los de Pavel Petronel Tanase, de 45 años; Mario Pisani, de 73 años y Vincenzo Franchina, de 36 años y el jueves fueron hallados los cadáveres de Adriano Scandellari, de 57 años; Paolo Casiraghi, de 59 años y Alessandro D’Andrea, de 37.
Ahora se intenta vaciar el agua de las plantas implicadas en la explosión para iniciar las investigaciones que han ordenado los fiscales de Bolonia.
Las pesquisas por el momento se están concentrando en la regularidad de la cadena de contratas por parte de la compañía Enel Green Power, para la manutención de la central, indicaron los medios.
El Grupo Enel lanzó este jueves una recaudación de fondos entre sus trabajadores para ayudar a las familias y varios dirigentes de la empresa han expresando su más sentido pésame y se han mostrado completamente a disposición para colaborar en las investigaciones.
“No tenemos informes de problemas de seguridad”, aseguró este viernes el director general de Enel Green Power, Salvatore Bernabei, en una entrevista concedida al diario ‘La Repubblica’, respondiendo a las alarmas levantadas por los sindicatos, y sobre las causas dijo: “Es demasiado pronto para hablar de ello, lo veremos con calma, la situación es muy compleja y cualquier hipótesis sería prematura”.
En cuanto a las subcontratas, Bernabei subrayó: “Somos el cliente. Cada empresa a la que encargamos las obras, dentro de unas reglas precisas, puede organizar los recursos y medios como crea más eficiente para realizar mejor el trabajo. Hay que tener en cuenta que no es fácil encontrar personal altamente cualificado para este tipo de actividad”.
Según había explicado la compañía tras el accidente, “en la central se estaban realizando labores de eficiencia, que Enel Green Power encargó en 2022 a tres empresas primarias, Siemens, ABB y Voith”.
Todas las víctimas eran trabajadores que estaban llevando a cabo trabajos de renovación tecnológica en las turbinas, ya que en el momento del desastre en el lugar trabajaba un equipo de unas quince personas.
Según una primera reconstrucción, la explosión fue provocada por la deflagración de una turbina que debía entrar en funcionamiento ayer, así lo confirmó también por la tarde el delegado de gobierno de Bolonia, Attilio Visconti: “Se estaban realizando trabajos para modernizar la central eléctrica, pero de repente explotó una turbina”.
El techo entre los pisos octavo y noveno se derrumbó, provocando la rotura de los conductos de refrigeración y por eso se inundó todo el noveno piso, que es donde los buzos encontraron a los desaparecidos.